Caminar con gigantes te hace sentir pequeño

Dice Blogger que llevo dos años sin colgar ninguna entrada en el blog. Ha pasado mucho tiempo y muchos cambios en mi vida desde entonces. Ahora mismo escribo desde el Colegio de España en París, donde llevo mes y medio y me queda otro tanto de estancia. No voy a hablar de París, esta ciudad que contiene mil ciudades más pequeñas e infinitas perspectivas y puntos de fuga, me costaría demasiado encontrar las palabras. El caso es que nunca había visto gran diferencia a nivel cultural entre la gente de provincias y quienes viven en las grandes urbes. Hasta esta estancia.
Aquí en un desayuno cualquiera, un arquitecto, un ingeniero y una filóloga pueden iniciar una muy tradicional conversación sobre el tiempo para acabar metiéndose de lleno en cuestiones de cualquier tipo en las que sacan a relucir su vasta (con v) cultura dando su opinión sobre los pintores impresionistas, la literatura francesa del XIX, la pintura flamenca del XVI, sus autores preferidos de ópera o el último cine-concierto contemporáneo que fueron a ver. Todo ello lleno de nombres de artistas, escritores, filósofos y pensadores en general, mayormente desconocidos para un servidor. Es la leche. Nunca hasta ahora me había visto tan tonto como ahora. Estoy aprendiendo de todo, y cuando digo de todo es absolutamente de todo, desde el motivo por el que cada vez hay más chinos en las universidades españolas hasta cuales son los principales referentes en fotografía artística o arquitectura contemporánea. En resumen, una experiencia extremadamente enriquecedora en lo personal.
Pd: estoy empezando a descubrir el gusto por el arte contemporáneo en general, así que cierro el post con una foto de Mireia Ferrón. Amiga y compañera en el Colegio de España. Aquí tenéis su web.