Después de muchos vueltas por los tugurios más oscuros de la red he llegado a una conclusión. Quizás os parezca una estupidez, pero resulta que los blogs más interesantes son los de la gente normal.
No me estoy refiriendo a gente sin grandes rarezas sino a la GENTE NORMAL así, con mayúsculas. La gente que no hay otro adjetivo para describir, que entran en una serie de estereotipos que no solemos considerar interesantes. Esa gente que nunca pensarías que pueda tener un blog o que no imaginas de qué podrían hablar si lo tuviesen.
Y para que lo comprobéis con vuestros propios ojos aquí tenéis el blog del taxista que os llevó el otro día, el del quiosquero de la esquina o el de la abuela del tercero derecha. Pero también los hay de amas de casa, de jubilados, de aficionados al ganchillo,...
Blogs que son infinitamente más cercanos a la realidad de lo que esperas y a la vez tan distintos de tu realidad que no te dejan nunca indiferente.
También la realidad más cotidiana tiene su hueco en internet.
1 comentario:
Tampoco es tan raro: un blog viene a ser un diario de toda la vida, algo que antes sí se estilaba mucho y que hubo un tiempo que fue relegado a un segundo plano hasta la aparición de estos que tantos usamos.
Cualquier persona tiene algo que decir y que puede ser interesante. Sólo es cuestión de que sepa cómo decirlo o que tenga ganas...
El de la abuela me pareció escuchar por Internet (si no es el mismo es uno parecido) que era el nieto el que le escribía las entradas. No obstante, sigue siendo curioso.
Tener un blog no implica hablar de jerbos orejudos o contar chistes sin gracia... :P
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