lunes, 16 de marzo de 2009

Una de parásitos

Aunque estamos en tiempos de crisis no voy a hablar sobre los banqueros, sino sobre otros parásitos aún más aterradores. Concretamente del Toxoplasma gondii y de la Sacculina, unos bichitos tan chungos que hacen que las garrapatas, tenias, pulgas y sanquijuelas parezcan inocentes.

El Toxoplasma gondii es un protozoo parásito que únicamente se reproduce de manera sexual dentro de los felinos (principalmente los gatos domésticos). Pero asexualmente se puede propagar por otros organismos de sangre caliente como humanos y ratones. En humanos sólo es peligroso en embarazadas ya que puede llegar a matar al feto, pero hay tratamiento.
En principio se limita a formar pequeños quistes dentro de las propias células, donde se reproduce asexualmente. La célula explota al cabo del tiempo liberando más parásitos que son casi todos eliminados por el sistema inmune, pero alguno queda vivo. Lo curioso es que estas copias tienen preferencia por llegar al cerebro y a los músculos, y cuando se trata de un roedor tienen un curioso efecto: hacen que el roedor sea atraído por el olor de los gatos en vez de huir y recordemos que el Toxoplasma gondii sólo se reproduce sexualmente en gatos...

Si esto no os ha impresionado lo suficiente aquí llega la Sacculina. Esta vez hablamos de un crustáceo cirrípedo, pariente de los percebes. Este vive en el mar y desde que nace va atravesando varios procesos larvales. En el último estado se fija a la concha de un cangrejo y va creando una concha para protegerse. El cangrejo por su parte intenta por todos los medios deshacerse del inquilino, ya que si este logra formar la concha estará perdido.
Hasta aquí todo normal, los cangrejos ermitaños llevan anémonade mar y ambos se benefician. Pero la Sacculina no es tan buena. Una vez ha formado la concha y está fijada al caparazón desarrolla una especie de aguja con la que lo atraviesa e inyecta unas pocas células. Estas se van extendiendo por todo el cuerpo del cangrejo formando una red y van sustrayendo los fluidos que necesitan para vivir.
Entonces empieza a formarse una especie de bolsa en el abdomen del cangrejo, justo donde las hembras de cangrejo guardan sus huevos. Sería fácil para el cangrejo arrancársela, pero la Sacculina ya ha invadido el sistema nervioso y si el cangrejo es hembra le hace creer que es su progenie la que lleva dentro, así que este hará todo lo posible para asegurar la supervivencia de esos que considera sus hijos. Esto solo pasa si el cangrejo es hembra, si es macho es mucho peor, ya que la Sacculina lo castra, lo convierte en hembra y lo obliga a cuidar a su progenie mientras se alimenta de él.

Más información aquí y aquí, estas avispas icneumónidas también molan, pero "solo" devoran a su hospedador sin llegar a controlarlo.

2 comentarios:

Baluar dijo...

Eso es lo que haces en ves de estudiar arte? xDDD

Anónimo dijo...

Me has acojonado.