No se enteran

No se enteran. Llevamos un mes demostrándolo y no se enteran.

La sociedad ha cambiado, ya no es la misma que hace 30 años. Hemos sido educados de manera diferente a como lo fueron nuestros padres o abuelos. El examen de selectividad de historia que antes consistía en recitar la lista de los reyes godos ahora es un comentario de texto. Es solo un ejemplo del cambio en la educación, ahora estamos acostumbrados a participar en las clases, a preguntar, a cuestionar lo que nos cuentan. Quizás no todo lo que deberíamos pero sin duda mucho más que antes.

Por otro lado ahora tenemos herramientas que nos permiten hacer cosas que antes eran poco menos que fantasía. La comunicación horizontal, gracias a Internet, está dejando obsoletas muchas instituciones. La Wikipedia, hecha entre todos los internautas voluntariamente, ya supera en calidad a prácticamente cualquier otra enciclopedia; Twitter ofrece información de manera mucho más rápida que cualquier otro medio y en ocasiones hasta desde el mismo lugar de la noticia; en las redes P2P encontramos más películas, libros y discos que en cualquier biblioteca, videoclub o tienda de discos; Democracia Real Ya sacó a la calle a más gente un domingo cualquiera que los sindicatos el día del trabajador; y así suma y sigue.

Los que hemos crecido en este ambiente estamos acostumbrados a la horizontalidad y a la inmediatez en las relaciones sociales y de repente nos hemos encontrado en un mundo que no nos entiende. Los medios de comunicación, las instituciones económicas y las instituciones políticas son verticales. No es posible establecer con ellas un diálogo que se salga del "si no te gusta lo que hago o como lo hago pues elije otra opción". Y eso a nosotros no nos vale. Queremos participar. Y hoy día participar no es votar una vez cada 4 años.

El cambio hacia unas instituciones más horizontales es inevitable. Los medios para hacerlo ya existen, la cuestión es cuando se producirá el relevo generacional que lo permita. Un relevo generacional que no se está produciendo. En política el candidato de uno de los principales partidos ya era ministro hace 20 años y el otro hace 16. Pero es que en el mercado laboral, tenemos un 43% de paro juvenil. Nos llaman antisistema por no resignarnos a sus reglas, pero es el sistema el que no nos deja participar.

Hemos estado un mes acampados denunciándolo, convocando manifestaciones, organizándonos horizontalmente con asambleas y redes sociales. Pero no se enteran. No quieren hacerlo.